jueves, 25 de octubre de 2012

FABIO FIALLO

Fabio Federico Fiallo Cabral (3 de febrero de 1866 - 29 de agosto de 1942) fue un escritor, poeta y político dominicano.

Nació en Santo Domingo, el 3 de febrero de 1866. Hijo de Juan Ramón Rodríguez Fiallo (político Dominicano, diputado al Congreso de la República Dominicana en 1867) y Ana María Cabral Figueredo. Desde muy joven contó con la orientación política de su padre, quien desde la administración del Presidente General José María Cabral y Luna formó parte de importantes comisiones encargadas de negociar un Tratado de Paz, Amistad y Comercio entre Haití y la República Dominicana. Luego de ingresar a la Facultad de Derecho en el Instituto Profesional, abandonó sus estudios para dedicarse a la política y la poesía desde joven. [1]
Fungió como funcionario público desde diferentes posiciones en el Gobierno de la República Dominicana, entre ellos: Procurador Fiscal del Tribunal de Primera Instancia de Santo Domingo, Subsecretario de Interior y Policía (1903), Comisionado Especial del Gobierno en Azua, Samaná y Barahona (1904), Cónsul en La Habana (1905), en New York (1905) y en Hamburgo (1910), Gobernador de Santo Domingo (1913) y Miembro de la Comisión de Pensiones (1932).
Estuvo casado en dos oportunidades, la primera con Prudencia Lluberes Contreras (Octubre de 1892) con quien procreó a Prudencia Atala (1897), León Octavio (1894), y a Rafael; sus segundas nupcias las contrajo con María Bonetti Ernest (1905), con quien procreó a Margarita, Fabio y Julia Amelia.

OBRAS

  • Primavera sentimental (1902)
  • Cuentos frágiles (1908)
  • Cantaba el ruiseñor (1910)
  • Canciones de la tarde (1920)
  • Plan de acción y liberación del pueblo dominicano (1922)
  • Jurb (1922)
  • La cita (1924)
  • Canto a la bandera (1925)
  • La canción de una vida (1926)
  • Las manzanas de Mefisto (1934)
  • El balcón de Psiquis (1935)
  • Poemas de la niña que está en el cielo (1935)
  • Sus mejores versos (1938)
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    Juan Clemente Zenea



    Juan Clemente Zenea, escritor cubano nació en Bayamo, Granma, el 24 de febrero de 1832. Se reconoce que ejerció gran influencia en la literatura cubana al retomar el Romanticismo, marcando una nueva línea en la poesía hispanoamericana.
    En 1845 entra al colegio de José de la Luz y Caballero, donde manifiesta por primera vez su inclinación hacia la literatura. En 1846 publicó sus primeros poemas en el periódico habanero "La Prensa", en el cual llegó a ser redactor en 1849.
    A partir de ese momento el número de sus obras aumentaron considerablemente, por ejemplo, publicó en colaboración con José Fornaris y Rafael Otero “La mujer ¿Es un ángel? ¡No es un ángel! ¿Si será o no será?”. Realizó la redacción de "Almendares" junto a Idelfonso Estrada Zenea y colaboró en "La voz del pueblo".

    Augusto Ferran

    Augusto Ferrán y Forniés (Madrid, 27 de julio de 1835, - Madrid, 2 de abril de 1880), poeta español del Postromanticismo.
    Hijo de padres acaudalados, era de ascendencia catalana por su padre, Adriano, un barcelonés incinado a la pintura, y aragonesa por su madre, Rosa, oriunda de Pallaruelo, Huesca. La empresa familiar consistía en un taller de molduras doradas en Madrid. Su padre se marchó a La Habana buscando mayor fortuna y Augusto comenzó estudios secundarios en el Instituto del Noviciado. Su formación se completó con un fructífero viaje a Alemania (Múnich, Estrasburgo, Heidelberg), pasando por París, lo que le permitió conocer la poesía de Heinrich Heine y los lieder de Franz Schubert, Felix Mendelssohn-Bartholdy y Robert Schumann; parece ser que también se dio a la bebida.

    En 1861 ya había aparecido su libro La soledad, en cuya primera parte reproducía algunos cantares populares de la lírica tradicional que en la segunda compuso originales, imitando su estilo e inspiración. Son temas recurrentes en estas últimas coplas la búsqueda de soledad para huir de un mundo hostil, la oposición entre pobres y ricos, el paso del tiempo, la angustia existencial y el amor.

    Poesía
    • La soledad (1861)
    • La pereza (1871)

    Prosa

    • "Una inspiración alemana", en Revista de España, (marzo de 1872).
    • "El puñal", leyenda pubicada en El Museo Universal de 1863.
    • "La fuente de Montal" (1866)

    Cecilia Camps

    Escritora española, nacida en la segunda mitad del siglo XIX y fallecida en la siguiente centuria, en fecha y lugar desconocidos (pero siempre después de 1916, año en el que se estrenó la única obra teatral que, en la actualidad, puede atribuirse con certeza a su autoría). Salvo la existencia de esta pieza dramática, no conocemos ningún otro dato referido a esta olvidada dramaturga, que, por el mero hecho de ser mujer y dedicarse a la creación dramática, fue víctima de los prejuicios reaccionarios y misóginos de la crítica teatral de su época.
    En efecto, en 1916 fue llevada a las tablas su comedia titulada El gran guiñol, una obra que ponía sobre el escenario una valiente y encendida defensa de la libertad de la mujer a la hora de abandonar a su esposo cuando las irreductibles desavenencias conyugales no dejaban otra escapatoria. El crítico contemporáneo P. Caballero, en la reseña que hizo de este estreno para la publicación periódica Lecturas dominicales, advertía que se trataba de "una de las pocas comedias españolas escritas por mujeres", para añadir a continuación la siguiente valoración de la autora y su obra: "Doña Cecilia Camps se propone en este obra resolver en sentido absolutamente libertario el conflicto conyugal, en el caso de la 'no comprensión' del uno y de la otra. La mujer casada se va con el amante y nada más. La tesis de la obra de la señora Camps es tan antigua como el adulterio, y tan despreciable y reprobable como él. Por lo demás, como dijo el otro, Doña Cecilia acabará por comprender, así lo deseamos, que hay mucho que zurcir, y mucho que guisar, y mucho que planchar en las casas" (cit. por Juan Antonio Hormigón, en su valioso estudio recogido en el epígrafe "Bibliografía").
    No es de extrañar que, con estas críticas tan vitriólicas como desatinadas, El gran guiñol, que se había estrenado en un foro tan relevante como el madrileño Teatro de la Zarzuela, no fuera objeto de una edición impresa.

    Ruben Dario





    Nacido como Félix Rubén García Sarmiento en Nicaragua en 1867, es hoy mundialmente conocido por su seudónimo: Rubén Darío. Referente del modernismo en nuestro idioma por su obra "Azul...", en sus poemas se perciben fuertes influencias de escritores franceses. Fue también representante de su país en el exterior ostentando distintos cargos, haciéndose evidente su compromiso sociopolítico también en sus obras como en "A Colón". Son otras obras fundamentales "Sonatina", "Lo fatal" y "Canción de otoño

    El símbolo más característico de la poesía de Darío es el cisne, identificado con el Modernismo hasta el punto de que cuando el poeta mexicano Enrique González Martínez quiso derogar esta estética lo hizo con un poema en el que exhortaba a "torcerle el cuello al cisne".[28] La presencia del cisne es obsesiva en la obra de Darío, desde Prosas profanas, donde el autor le dedica los poemas "Blasón" y "El cisne", hasta Cantos de vida y esperanza, una de cuyas secciones se titula también "Los cisnes". Salinas explica la connotación erótica del cisne, en relación con el mito, al que Darío se refiere en varias ocasiones, de Júpiter y Leda.[29] Sin embargo, se trata de un símbolo ambivalente, que en ocasiones funciona como emblema de la belleza y otras simboliza al propio poeta.
    El cisne no es el único símbolo que aparece en la poesía de Rubén Darío. El centauro, en poemas como el "Coloquio de los centauros", en Prosas profanas, expresa la dualidad alma-cuerpo a través de su naturaleza medio humana medio animal. Gran contenido simbólico tienen también su poesía imágenes espaciales, como los parques y jardines, imagen de la vida interior del poeta, y la torre, símbolo de su aislamiento en un mundo hostil. Se han estudiado en su poesía otros muchos símbolos, como el color azul, la mariposa o el pavo real

    Cesar Conto

    César Conto Ferrer fue un político y poeta colombiano, nacido en Quibdó, Chocó el 18 de enero de 1836 y fallecido en Ciudad de Guatemala, Guatemala el 30 de junio de 1891.[1]
    Miembro de una connotada familia caleña, estudió en el Colegio Santa Librada de esta ciudad y obtuvo el título de abogado en la Universidad del Rosario y se convirtió en seguidor del Partido Liberal, particularmente del sector radical que lideraba Manuel Murillo Toro; desarrolló una carrera política que lo llevó a ser Presidente del Estado del Cauca entre 1875 y 1877, teniendo que enfrentar la guerra civil de 1876 ante el levantamiento del Partido Conservador.[2] Entre 1875 y 1876 fue así mismo, Segundo Designado Presidencial.
    Se destacó como poeta, traductor y repentista. Siendo Presidente del Estado contó con su primo Jorge Isaacs como Superintendente de Instrucción Pública.

    Pablo de Jerica

    Primogénito de una familia de comerciantes. Estudió filosofía en el convento de dominicos de su ciudad natal. Mientras se preparaba para cursar leyes en la Universidad de Oñate, hizo una traducción en romance endecasílabo de las Heroidas de Ovidio. En 1804 imprime sus Cuentos jocosos en diferentes versos castellanos (Valencia, 1804) y se traslada a Cádiz para dirigir los negocios familiares; allí da a luz una traducción dramática del francés Picard, Los títeres o lo que puede el interés (Cádiz, imprenta de Quintana, 1807), y aprende italiano, inglés y portugués. Colaboró en El Redactor General dando a conocer sus opiniones de liberal exaltado y anticlerical. Frecuenta la tertulia del Café de la Esperanza y, entre 1811 y 1813, redacta el Diario Mercantil bajo las iniciales P. J. y C.; las escasas colaboraciones de 1813 derivan de su viaje a La Coruña, donde había algunos amigos suyos refugiados como Valentín de Foronda y Marcelino Calero, o intelectuales como Manuel Pardo de Andrade, con quien coincidió en la redacción de El Ciudadano por la Constitución, donde este colaboraba desde 1812. En sus páginas, como en la de los diarios de Cádiz, Jérica apostó por una poesía de combate ideológico que cambiara la mentalidad tradicional del pueblo; ataca el servilismo y a la Inquisición. En La Coruña, Jérica se convierte en secretario de la Junta de Censura y Protección de la Libertad de Imprenta desde noviembre de 1813. A principios de marzo del año siguiente volvió a su ciudad natal y escribe en el Correo de Vitoria.

    Obra
    • Cuentos jocosos en diferentes metros castellanos, (Valencia, 1804).
    • Ensayos poéticos (Valencia, 1814 y París, 1817).
    • Poesías (Vitoria, 1822)
    • Poesías (Burdeos, 1831)
    • Colección de cuentos, fábulas, descripciones, anécdotas, diálogos selectos (Burdeos, 1831)
    • Miscelánea instructiva y entretenida (Burdeos, 1836)
    • Letrillas y fábulas (Burdeos, 1837)
    • Los títeres, o Lo que puede el interés (Cádiz, 1807), comedia en prosa en cinco actos. traducida del francés.
    • Los serviles o El nuevo periódico. Cádiz, 1811. Comedia original en un acto.

    miércoles, 24 de octubre de 2012

    Manuel Amor Meilan

    Fue fundador de la Real Academia Gallega y miembro de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, de la Academia de Bellas Artes de Barcelona, de la Academia de Bellas Artes y Ciencias de Toledo y de la Sociedad Arqueológica de Pontevedra. Trabajó como funcionario en la Diputación Provincial de Lugo. Fue redactor del diario El Regional, que luego dirigió durante veinte años. También dirigió el diario La Provincia. Además, colaboró en otros periódicos y publicaciones como La Ilustración Artística, Revista de España, La Ilustración Ibérica...

    Obras realizadas:
    Manuel Amor Meilán reflejó el bilingüismo de Galicia, expresándose tanto en gallego como en castellano. Como poeta, publicó en castellano Pedro Madruga (1887), Dolores. (Álbum de mi hija) (1890), Floralba (1902), Cuentos y romances (1907) y Romances (1916). Como novelista, publicó Mendo de Maceda o los amores de un noble (1882), Justicias y crueldades (1883), Desde la honradez al crimen (1884), Amante, esclava y verdugo (1889), La Corona de fuego o el secreto de una tumba, Sol y sombra. Cuentos y paisajes (1893), El último hijodalgo (1893), La Cadena (1905), La Bella Cintia, Suriña y Carne de poetas (1913). En gallego escribió Xuana y Os fillos da praya. Como dramaturgo, publicó El regreso y El corazón y la ley (1897), Sísifo, Las alas rotas, Robo sin fractura, De la corte al cortijo, Floridor, Men Rodríguez Tenorio, In articulo mortis y La vida en Lugo. Además, trató la historia de Galicia en las monografías Gregorio Hernández (El Murillo de la escultura), La ofrenda y el entierro en Galicia en el teatro antiguo, Galicia y la nacionalidad española, Memoria crítico-bibliográfica sobre el teatro regional gallego, etc.

    Ramon de Campoamor

    Nació en Navia, Asturias, el 24 de septiembre de 1817, el mismo año que José Zorrilla, con quien con frecuencia fue comparado. Su padre era un rico labrador nacido en el concejo de Coaña y su madre era de la familia noble de los Campo Osorio de Navia. En 1821, cuando Ramón aún no había cumplido cuatro años, muere su padre Miguel Pérez Campoamor. A los diez años comienza a estudiar Latín y Humanidades en Puerto de Vega, donde obtuvo el certificado de estudios primarios.

    En 1832, con 15 años se marcha a Santiago de Compostela para estudiar filosofía, lógica y matemáticas, en el convento de Santo Tomás de Madrid.

    A la edad de 20 años, en 1838, publica la primera obra impresa: Una mujer generosa, una comedia en dos actos que no llegó a ser estrenada en teatro; otras obra dramática suyas fue El castillo de Santa María (1838); por esos años escribió también piezas como La fineza del querer o El hijo de todos; ejerció de dramaturgo palatino en el México de Maximiliano y tras un intervalo más o menos largo, en 1870 escribió la que es tal vez su obra más conocida, Guerra a la guerra, a la que siguieron el drama sacro El hombre Dios (1871) y la zarzuela Jorge el guerrillero, escrita en colaboración con Navarro, las comedias Moneda falsa y Cuerdos y locos, y el drama Dies irae (1873). Con Fuentes escribió Las penas del purgatorio (1878) y ya en la década de los ochenta termina su carrera dramática dedicándose a los monólogos (Cómo rezan las solteras, El amor o la muerte, El confesor confesado).
    También en 1838 había empezado su carrera como poeta; publica sus primeros versos románticos en el libro Ternezas y flores; pero es en Ayes del alma (1842), su segundo libro lírico, cuando empieza a alejarse del Romanticismo, aunque todavía continúan en él los resabios de Espronceda; en otro libro, Fábulas se hallan ya prefigurados y con sus caracteres esenciales los tres géneros que han de ser creados y cultivados por el poeta, sus personalísimas doloras, pequeños poemas y humoradas, que le adscriben a la estética del Realismo. El propio autor define así estos géneros:
    ¿Qué es una humorada? Un rasgo intencionado ¿Y dolora? Una humorada convertida en drama ¿Y pequeño poema? Una dolora amplificada.

    Julian del Casal

     

    (La Habana, 1863 - id., 1893) Poeta cubano. Aunque inició su trayectoria dentro del romanticismo decimonónico, es considerado un precursor de la estética modernista. Nacido en el seno de una familia acomodada, de padre español y madre cubana, perdió a su madre siendo muy niño, y a su padre cuando contaba 22 años; la fortuna paterna se vino abajo y su vida cambió radicalmente. Julián del Casal se encontró sin recursos frente a la vida, tras los estudios que había cursado en el Colegio Belén, y a solas con el caudal de sus inclinaciones literarias y periodísticas.

    Casi al final de su vida publicó los tres libros que constituyen sus obras completas: Hojas al viento (1890), todavía con marcada influencia del romanticismo español y francés; el parnasiano Nieve (1892) y, finalmente, Bustos y Rimas (1893), conjunto de prosas y versos en el que se aprecia la influencia de Charles Baudelaire y de Paul Verlaine, y una intuición que preanuncia el modernismo. En este último libro predomina el subjetivismo peculiar de Casal, su alma lírica dominada por la tristeza irreparable, por el ensueño superador de la estrecha y mísera realidad provinciana, monótona y vulgar, que le rodea. Se añade a ello su necesidad espiritual de refinamiento, su aptitud para la expresión tanto de estados de alma como de escenas brillantes de la naturaleza y su progresiva maestría para la factura del verso nuevo.
     
    La fantasía desbordada de Casal pareció prever los honores que se le habían de rendir después de la muerte (Fatuidad póstuma); Martí y Rubén Darío cantaron su grandeza. Su obra dispersa en El estudiante (periódico manuscrito de su primera juventud), en el semanario La Habana Elegante, en El País, La Discusión, El Fígaro y La Caricatura, ha sido recogida y publicada recientemente. Ejerció el periodismo con los seudónimos El conde de Camors, Hernani y Alceste.

    Francisco A. De Icaza

    Lugar de nacimiento y/o fecha de nacimiento: México, 1863 - Madrid, 1925
    Poeta y crítico mexicano. Volcado desde su juventud hacia la carrera diplomática, desempeñó diversos cargos en representación del pueblo mexicano en Alemania y España, país este último en el que pasó la mayor parte de su vida, primero en calidad de diplomático y, tras el estallido de la Revolución en su lugar de origen, en condición de exiliado
    Hombre de vasta formación intelectual, recibió numerosos honores académicos tanto en México (donde fue elegido miembro de la Academia Mexicana) como en España (donde ocupó sendos sillones en la Academia Española de Historia y en la de Bellas Artes). En su país natal, seis años antes de su muerte, se convirtió en uno de los impulsores y fundadores de la Academia Mexicana de la Historia, que celebró su sesión inaugural en 1919, en su sede de la calle de San Ildefonso de la capital mexicana. En el acta de inauguración figuran como miembros fundadores, junto a Francisco A. de Icaza, otros eruditos aztecas tan notables como Luis García Pimentel, el padre Mariano Cuevas, el marqués de San Francisco, el padre Jesús García Gutiérrez, Jesús Galindo y Villa, Luis González Obregón y Juan B. Iguiniz
     
    Francisco de Asís de Icaza fue también un notable poeta que gozó del reconocimiento de sus contemporáneos, sobre todo por su perfecta asimilación de la poesía tradicional española. Entre sus poemarios impresos, cabe recordar aquí los titulados Lejanías (1892), La canción del camino (1906) -obra en la que alcanzó sus mayores logros a la hora de adaptar a la pluma de un autor culto como él las formas populares- y Cancionero de la vida honda y de la emoción fugitiva (1922).
    Fue en España donde comenzó a frecuentar los foros y cenáculos literarios y donde entabló amistad, en plena juventud, con algunos poetas modernistas de la talla del cubano Julián del Casal y el malagueño Salvador Rueda. En Madrid también, cuando ocupaba ya el cargo de embajador de México, nació en 1899 su hija Carmen de Icaza, una de las figuras más representativas de la narrativa española del siglo XX escrita por mujeres

    Gustavo Adolfo Becquer


    Gustavo Adolfo Claudio Domínguez Bastida (Sevilla, 17 de febrero de 1836Madrid, 22 de diciembre de 1870), más conocido como Gustavo Adolfo Bécquer, fue un poeta y narrador español, perteneciente al movimiento del Romanticismo, aunque escribió en una etapa literaria perteneciente al Realismo. Por ser un romántico tardío, ha sido asociado igualmente con el movimiento posromántico. Aunque, mientras vivió, fue moderadamente conocido, sólo comenzó a ganar verdadero prestigio cuando, tras su muerte, fueron publicadas muchas de sus obras.
    Sus más conocidos trabajos son sus Rimas y Leyendas. Los poemas e historias incluidos en esta colección son esenciales para el estudio de la Literatura hispana, siendo ampliamente reconocidos por su influencia posterior.

    Bécquer como dibujante
    Desde niño estuvo rodeado de lienzos y dibujos de su padre lo que hizo que también se interesara por la pintura. Dijo que la pintura es un medio de expresión hacia lo inefable, superando a la escritura.
    Entre sus amistades siempre se le apreció su madera de dibujante y colaboró varias veces con su hermano Valeriano. Destaca su gran técnica y refleja su mundo interior. La vida y la muerte están entrelazados en la mayoría de sus dibujos de sus serie Les morts pour rire. Bizarreries. Las escenas dibujadas provocan la risa, el reírse de la muerte.
    También realizó dibujos en donde representa sus mundos imaginarios reflejados en sus Rimas y Leyendas.
    Julia Espín también abarca gran parte de la obra pictórica de Bécquer, reflejándola en distintas situaciones.

    OBRAS
  • Historia de los templos de España, Madrid, 1857, publicada sólo el tomo I.
  • Cartas literarias a una mujer, 18601861, publicadas en El Contemporáneo.
  • Cartas desde mi celda, Madrid, 1864, son nueve, publicadas en El Contemporáneo, y reunidas posteriormente en la edición de Fortanet con el título Desde mi celda.[6]
  • Libro de los gorriones, 1868, manuscrito.
  • Obras completas, Madrid, Fortanet, 1871, 2 volúmenes.

  • Jose Zorilla


    Valladolid, 1817 - Madrid, 1893) Escritor español. Es el principal representante del romanticismo medievalizante y legendario. En 1833 ingresó en la Universidad de Toledo como estudiante de leyes, y en 1835 pasó a la Univerisdad de Valladolid.
    José Zorrilla publicó sus primeros versos en el diario vallisoletano El Artista. En Madrid, después de abandonar su carrera universitaria, alcanzó fama tras leer unos versos suyos ante el cadáver de Larra (1837). Ocupó el cargo de éste en la redacción de El Español, donde publicó la serie de poemas titulada Poesías (1837), primero de una serie de ocho volúmenes que acabó en 1840. Su éxito poético se renovaría en 1852 con un poema descriptivo, Granada, que quedó inacabado. En 1839 se casó con Matilde O'Reilly, de la que enviudó muy pronto.
    Escribió numerosas leyendas (Cantos del trovador, 1840-1841; Vigilias del estío, 1842; Flores perdidas, 1843; Recuerdos y fantasías, 1844; Un testigo de bronce, 1845), en las que resucita a la España medieval y renacentista. Cabe destacar «A buen juez mejor testigo», «Margarita la Tornera» y «El capitán Montoya».

    En 1846 viajó a Burdeos y París, donde conoció a Dumas padre, George Sand, Théophile Gautier y Alfred de Musset, que dejarían en él una gran huella. En 1855 marchó a México, donde fue protegido por el emperador Maximiliano, que lo nombró director del Teatro Nacional.
    De regreso a España (1866), José Zorrilla se casó con la actriz Juana Pacheco, viajó a Roma (1871) e ingresó en la Real Academia (1882). De estos años son Recuerdos del tiempo viejo (1880-1883), La leyenda del Cid (1882), El cantar del romero (1883) y Mi última brega (1888). Fue coronado como poeta en el alcázar de Granada (1889) por el duque de Rivas, en representación de la reina regente.







    Manuel Magallanes


    La Serena. 8 de noviembre de 1878. San Bernardo 1924) poeta romántico , dramaturgo y periodista chileno.
    Fue periodista, y crítico en Las Últimas Noticias y en El Mercurio, donde utilizó el seudónimo de “M. de Ávila”. También fue editor de la revista Chile Ilustrado y colaboró con la revista Juventud.
    Su padre fue Intendente de Coquimbo y miembro de la Corte de Apelaciones. Realizó sus estudios humanísticos en Santiago. Vivió largos años en la ciudad de San Bernardo, en la calle Eyzaguirre donde realizaba tertulias literarias.
    Se casa en 1903 con su prima Amalia Villa Magallanes. Se desempeñó como Secretario Municipal y Alcalde de San Bernardo. Funda en 1911 el periódico La Reforma que se mantuvo hasta 1916.
    Vinculado a los escritores Pedro Prado, Baldomero Lillo y Augusto D'Halmar, perteneció al Grupo de los Diez, grupo de creadores pertenecientes a una multiplicidad de expresiones artísticas a comienzos del siglo XX. Fue integrado a la antología Selva Lírica, compilación que incorporó a los poetas más conocidos de la época. En 1914, fue jurado de los Juegos Florales de Chile, donde Gabriela Mistral obtuvo el primer premio con su poema: Los sonetos de la muerte
    Incursionó en la pintura, presentando una exposición publica en 1916. En 1918 funda la Sociedad de Conferencias Publicas en el salón de la Escuela Superior de Niñas Nº2. En 1922 viajó en misión oficial a Europa.

    Obra
    • Facetas. 1902, poesía
    • Matices. 1904, poesía
    • La jornada. 1910 poesía
    • Lluvia de primavera. 1912, teatro
    • ¿Qué es amor? 1914, cuentos
    • La casa junto al mar. 1918, poesía
    • Florilegio.

    Leopoldo Lugones


    Villa María del Río Seco, Argentina, 1874 - Buenos Aires, 1938) Poeta argentino. Hombre de vasta cultura, fue el máximo exponente del modernismo argentino y una de las figuras más influyentes de la literatura iberoamericana.
    Pasó la niñez y la adolescencia en su tierra natal, y tras breve temporada en Santiago del Estero, se estableció en Buenos Aires en 1895. Trabajó en el diario El Tiempo y en 1897 fundó, con José Ingenieros, La Montaña, periódico socialista revolucionario. Tras algunos empleos menores, llegó a la dirección de la Biblioteca Nacional de Maestros. Hizo varios viajes a Europa y residió en París de 1911 a 1914. Colaboró en La Nación y obtuvo el Premio Nacional de Literatura en 1926. En 1928 fundó la Sociedad Argentina de Escritores. Su apoyo al golpe de Estado de 1930, la posterior desilusión que éste le produjo y quizás una profunda crisis sentimental lo llevaron a una depresión que culminó en su suicidio.
     
    Como poeta, Leopoldo Lugones irrumpió en el panorama literario argentino con el poemario Los mundos (1893), que pasó prácticamente inadvertido. Su encuentro con Rubén Darío, en Buenos Aires, en 1896, fue decisivo para reorientar la poesía de Lugones. El retoricismo de Las montañas de oro (1897) no tardó en ser sustituido por el tono irónico, extravagante e imaginativo de Los crepúsculos del jardín (1905) y Lunario sentimental (1909).
     
    También brilló Leopoldo Lugones en su condición de ensayista, faceta en la que dejó algunos títulos tan relevantes como El imperio jesuítico (1904), Las limaduras de Hephaestos (1910) e Historia de Sarmiento (1911). Las conferencias sobre el Martín Fierro de José Hernández, obra que leyó como poema épico, reunidas en El payador (1916), constituyen sin duda un hito en la interpretación de la literatura gauchesca. Además, dejó testimonio impreso de las constantes mutaciones de su pensamiento político, plasmadas en Mi beligerancia y La grande Argentina.
     
     
     
     
     
     
     
     

    lunes, 22 de octubre de 2012

    Miguel Unamuno

     
    El bilbaíno Miguel de Unamuno es una de las personalidades más destacadas de la literatura española del siglo XX. Nació en Bilbao en 1864 y vivió la guerra carlista. En Madrid cursa la carrera de Filosofía y Letras y después de varios fracasos, ganó en 1891 la cátedra de Griego en la Universidad de Salamanca, donde vivó casi toda su vida. En 1901 sería elegido rector de esa Universidad.
    Tuvo una amplísima cultura antigua y moderna, filológica, literaria y filosófica. Fue un gran crítico de los distintos regímenes políticos en los que vivó y como consecuencia de su oposición a la dictadura del general Primo de Rivera fue desterrado (1924 - 1930) y se marchó primero a Fuerteventura y luego a Francia. Tras la caída del general vuelve triunfalmente a España y fue diputado durante la República. Ante las fuerzas de Franco su actitud inicial fue cambiante. Sin embargo su postura definitiva ante las fuerzas de Franco (con la famosa frase: "Venceréis pero no convenceréis") le valió ser destituido y confinado en su domicilio, donde murió el último día de 1936.
    Unamuno fue siempre un hombre inquieto y rebelde, paradójico y contradictorio, ferozmente individualista, siempre rindiendo culto a su propia personalidad. Luchador contra todo, en guerra consigo mismo, en continua tensión, no encontró nunca la paz, acosado de dudas religiosas y existenciales. Su vida estaba presidida por una intensa actividad intelectual, de incesante lucha consigo mismo.
     
    OBRA
    Practicó todos los géneros. Sus cualidades como poeta fueron infravaloradas durante mucho tiempo, aunque en la actualidad se le tiene por uno de los grandes líricos del siglo XX. Es una poesía que se caracteriza por su gran riqueza de pensamiento; los principales libros son: Poesías (1907), Rosario de sonetos líricos (1911), El Cristo de Velázquez(1920), Romancero del destierro (1928) y el Cancionero póstumo, Diario poético que fue publicado en 1953 y recoge poesías escritas entre 1928 y 1936.
    También es autor de importantes novelas. Figura Unamuno entre los más decididos renovadores de la novela a principios de siglo que a él le servía como cauce adecuado para la expresión de los conflictos existenciales.

      Su primera novela fue Paz en la guerra (1897) , una novela histórica sobre la última guerra carlista. Con Niebla (1914) inicia lo que él denominó nivolas: frente a la novela tradicional presenta nuestro autor el enfrentamiento de las almas, de las pasiones humanas, sin paisajes, ambientes ni costumbres. Niebla plantea el problema de la existencia y la personalidad. El protagonista, Augusto Pérez, se rebela contra el propio Unamuno, porque se da cuenta de que no es más que un ser de ficción, manejado al capricho del autor, y le recuerda que también él, Unamuno, como ser humano, depende del capricho de Dios. En 1917 publicaría Abel Sánchez y en 1921 La tía Tula . Su obra maestra llegaría en 1931, San Manuel bueno mártir . Esta es la dramática historia del párroco de una aldea perdida que, entregado ejemplarmente a su pueblo y manifestándose como un santo, oculta el tremendo desgarro interior de la duda en la otra vida.
     
    Escribió también numerosos libros de ensayo: En torno al casticismo (1902), Vida de Don Quijote y Sancho (1905), Por tierras de Portugal y España (1911), Andanzas y visiones españolas (1922), Del Sentimiento trágico de la vida (1922).
    Las obras dramáticas más importantes: Fedra (1910), El otro (1926) y El hermano Juan (1934). Son el intento de un teatro de ideas que resulta excesivamente esquemático y falto de acción dramática.

    Enrique Gonzalez Martinez

    (Guadalajara, 1871 - ciudad de México, 1952) Poeta mexicano que a principios del siglo XX clausuró el movimiento modernista hispanoamericano y abrió las puertas hacia una nueva sensibilidad poética, más acorde con los tiempos y la contemporánea aparición de las vanguardias.

    Hizo sus estudios secundarios en el seminario de su ciudad natal y cursó después la carrera de Medicina; ejerció su profesión en Sinaloa y se estableció en la ciudad de México en 1911: la prensa, la cátedra, la política y la diplomacia fueron desde entonces sus ocupaciones habituales; subsecretario de Educación Pública en 1919, representó después a su país en Chile (1920), Argentina (1922) y España (1924-1931). En 1946 se le otorgó al poeta el premio nacional Ávila Camacho.

    Sus primeros libros de poemas revelan claramente la influencia del modernismo, escuela que por entonces comenzaba su declive. A dicha época pertenecen Preludios (1903), Lirismos (1907) y Silénter (1909). La aparición de Los senderos ocultos (1911) marcó la ruptura del autor con la corriente modernista. Tal rechazo tiene su declaración de principios en el célebre soneto "Tuércele el cuello al cisne".

    Carolina Coronado

    Carolina Coronado Romero de Tejada (Almendralejo, Badajoz, 20 de diciembre de 1820 - Lisboa, 15 de enero de 1911, enterrada en el Cementerio de Badajoz), escritora española, considerada como la equivalente extremeña de otras autoras románticas coetáneas como Rosalía de Castro, y autora de tal notoriedad que llegaría a ser calificada con el título de "El Bécquer femenino". Fue tía de Ramón Gómez de la Serna.[1]

    La producción más importante de Coronado es la poética. Sus poemas fueron recogiéndose poco a poco en revistas, y más tarde, en 1843, se recopilaron en un volumen (Poesías) con prólogo de Hartzenbusch. En las posteriores ediciones de 1852 y 1872 se incorporaron nuevos poemas. Sin embargo, hasta hace poco no se ha podido conocer la totalidad de su obra.
    En prosa escribió un total de quince novelas, a destacar Luz, El bonete de San Ramón, La Sigea, Jarrilla, La rueda de la desgracia (1873) y Paquita (1850), ésta última considerada por algunos críticos como la mejor de todas.
    También escribió obras teatrales como El cuadro de la esperanza (1846), Alfonso IV de León, Un alcalde de monterilla y El divino Figueroa, aunque sólo logró estrenar la primera. El cuadro de la esperanza fue su obra más popular.

    Amado Nervo


    Amado Nervo era el seudónimo de Juan Crisóstomo Ruiz de Nervo y Ordaz, poeta y prosista mexicano, perteneciente al movimiento modernista. Nació el 27 de agosto de 1870 en la ciudad de Tepic, en ese entonces en Jalisco, hoy Nayarit, México y murió en Montevideo, Uruguay el 24 de mayo de 1919. Fue miembro correspondiente de la Academia Mexicana de la Lengua, no pudo ser miembro de número por residir en el extranjero.
    Poeta, autor también de novelas y ensayos, al que se encasilla habitualmente como modernista por su estilo y su época, clasificación frecuentemente matizada por incompatible con el misticismo y tristeza del poeta, sobre todo en sus últimas obras, acudiéndose entonces a combinaciones más complejas de palabras terminadas en "-ismo", que intenta reflejar sentimiento religioso y melancolía, progresivo abandono de artificios técnicos, incluso de la rima, y elegancia en ritmos y cadencias como atributos del estilo de Nervo.
  • El bachiller, novela de juventud (1895).
  • Perlas negras , poesía (1896).
  • Místicas, poesía (1898).
  • Poemas publicada en París (1901).
  • El éxodo y las flores del camino, poesía (1902).
  • Lira heroica, poesía (1902).
  • Los jardines interiores, poesía (1905).
  • Almas que pasan, prosa (1906).
  • En voz baja, poesía (1909).
  • Ellos, prosa.
  • Juana de Asbaje, ensayo, biografía de Sor Juana Inés de la Cruz (1910).
  • Serenidad, poesía (1912).
  • Mis filosofías, ensayo (1912).
  • Elevación, poesía (1916).
  • El diablo desinteresado, novela (1916).
  • Plenitud, poesía (1918).
  • El estanque de los lotos, poesía (1919).
  • El arquero divino, poesía., también póstuma (1919).
  • Los balcones, novela (1922).
  • La amada inmóvil, poesía, obra póstuma en cuanto a su publicación (1922).
  • Dos novelas: Pascual Aguilera y El domador de almas de 1899 ; una zarzuela, Consuelo, puesta en metro músico por Antonio Cuyàs y estrenada en el Teatro Principal de la ciudad de México en 1899.

    TEODORO GUERRERO


    Teodoro Guerrero, poeta, autor dramático y novelista, nació en La Habana el 9 de noviembre de 1824. Tras estudiar en la Península, regresó a Cuba, donde se hizo conocido por su vínculo con El Diario de la Marina. Entre las publicaciones periódicas españolas en las que colaboró se cuentan La Ilustración Española y Americana, Barcelona Cómica, Blanco y Negro, El Día y Gente Vieja. Fundó con Andrés Avelino Orihuela el periódico jocoso El Quitapesares (1845). Entre sus obras cabe citar los Cuentos sociales (1876) y los dos lujosos volúmenes ilustrados que componen los Cuentos de salón. Asimismo, participó en la querella poética Pleito del matrimonio entre Teodoro Guerrero y Ricardo Sepúlveda, fenómeno al que Clarín dedicó un mordaz articulito en El Solfeo.
    El autor colaboró en el Semanario Pintoresco Español con tres cuentos («Amor a la dernière. Artículo com'il faut», 1846; «Memorias de una fea. Novela en miniatura», 1847; «Memorias de una bella. Novela sui generis», 1848), tres poemas («Un adiós a mi madre», 1845; «El verano de 1848. Un día en Madrid» y «El otoño de 1848. Un día en Madrid», 1848) y un relato de viajes («Viajes. Un año en La Habana», 1847). Ninguno de los tres relatos publicados en el Semanario Pintoresco Español apareció, por cierto, en los Cuentos sociales o los Cuentos de salón.
    Cuentos
    Teodoro Guerrero, «Amor a la dernière. Artículo com'il faut», Semanario Pintoresco Español, 32 (27 de diciembre de 1846), pp. 412-415.
    Teodoro Guerrero, «Memorias de una fea. Novela en miniatura», Semanario Pintoresco Español, 38 (19 de septiembre de 1847), pp. 229-304.
    Teodoro Guerrero, «Memorias de una bella. Novela sui generis», Semanario Pintoresco Español, 28 (9 de julio de 1848), pp. 221-224.

    Manuel Acuña




    Saltillo, 1849 - México, 1873) Poeta y dramaturgo considerado uno de los más destacados y característicos representantes del romanticismo mexicano. Su inflamado carácter romántico, el lirismo que fue apoderándose, poco a poco, de sus anhelos literarios y su naturaleza enfermiza conformaron paulatinamente unos poemas en los que se advierten los destellos de su pasión y su genio poético, características que la turbulencia de sus amores y desamores irían acentuando, para conducirlo, en medio de la locura de amor rechazado, al suicidio. El romanticismo del autor, sin embargo, incluyó, como en otros autores de la época, la actividad política y periodística y una visión filosófica liberal y positivista en que se reconoce el peso de Ignacio Manuel Altamirano, verdadero mentor de la generación romántica.

    Los poemas de Manuel Acuña vieron la luz póstumamente con el título de Versos, que se cambió por el de Poesías en la segunda edición (París, Garnier, 1884), y por el de Obras en la más reciente, o sea la publicada por José Luis Martínez (México, 1949). Produjo Acuña su obra poética entre 1868 y 1873, toda ella de carácter lírico, si se exceptúa el ya citado drama El pasado, que figura en las ediciones a partir de la de 1884.